Entre estas cuatro paredes cuelga mi alma, moribunda, vagabunda en alguna esquina. Cientos de palabras resbalan por el tejado cómo si fueran húmedad, negra. Cada vez que el sol desaparecé, una parte de mí con él. El cielo azul ya no me cuenta nada. Las nubes són mi refugio y mi historia. Escalofríos se pasean por mi espalda cada 3 minutos y mis pies y mis manos ya no sienten el tacto de lo que tocan. Mis labios estan secos. ¿De sed o de amor? Mi vida es un congelador que nunca se estropea y ya no hay manera de descongelarlo. La tinta de este boli se deshace en el papel. Se quema y fluye por las páginas dejando escrito algo que no són palabras. Mi corazón es un producto envasado al vacío. Sin aire, sin respiración. Cada vez vive mas desesperado para poder arrebatar alguna esperanza rasgada por los anhelos. Ya no siente nada. Sus latidos cada vez són mas escasos, mas lentos. Mi aliento en la noche ya no es blanco, perdió el alma un día...un día. La oscuridad me visita cada día. Ya nose si vivo despierta o durmiendo. Mis ojos no perciben tus pasos hacia mí ni tus manos calientes. Ahora sólo me queda contar las telarañas de esta pared en una mañana gris persiguiendo caladas de algo inexistente. Ahora, en estos momentos, ya nada me salva...nada.
y cuánto más anhelo,
más desesperación.
6 crujidos:
Te voy a borrar todas las telarañas que te atormenten...
Guapa :)
Anhelo, desesperación e impotencia...si lo sabré yo.
A mi de la película me cautiva todo, además el borda su papel. :)
Un beso
Andomos todos a golpes... Será el otoño?
Pero siempre encuentras a alguien que reaviva tu corazón.
Un besazo
He sufrido al discurrir por cada linea, porque has logrado llevarme mediante la lirica de tu dolor al dolor que fue mi ayer.
Un abrazo con mucho cariño.
Grandiosa composición.
Aix! The strokes. Me han cambiado la vida :)
Los tejados del otoño son traicioneros. Tanto como las telas de araña que teje el olvido en los rincones.
Saludos.
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